La Princesa y el Mar

Hace mucho, mucho tiempo, en un reino muy lejano, hubo una princesa enamorada del mar.

Vivía en un opulento castillo rodeada de todas las comodidades. Su padre, el Rey, quería que se casara con un príncipe, pero ella se negaba a contraer matrimonio sin cumplir su mayor sueño. Ver el mar.

Entonces, un buen día, decidió marchar en busca de su amado mar. Después de unos días se encontró con una rana que hablaba.

- "Bésame y me convertiré en un apuesto príncipe que te acompañará al mar".

Y le besó, pero le salió rana. Porque se convirtió en un terrible hechicero que la quería secuestrar. Pero lejos de acobardarse, la princesa sacó su espada y acabó con el hechicero.

Siguió caminando, cruzó bosques y trepo montañas. Y un buen día, vio el mar a lo lejos. Corrió hasta que llegó a la orilla y se quedó extasiada con la belleza de las olas y quiso ser una de ellas.

Entonces se le acercó un hada buena que pasaba por allí.

- "Te convertiré en una de ellas si tanto lo deseas"

La princesa accedió y poco tiempo después corria por los mares convertida en una ola.